jueves, 10 de septiembre de 2009

Una adolescente de cuarenta ...

... y pico.

Porque, como a cualquier adolescente, la inmadurez me persigue adonde quiera que vaya y cual sombra fiel. Pasan los años y no consigo espantarla. Terminé todo lo que quise estudiar (Ok!: terminé la etapa en la que quise estudiar algo), me ilusioné, me equivoqué, me enamoré, me casé, tuve un hijo (felizmente lo puse en ese orden Uff!), inicié un negocio que más parece una justificación y que tampoco termino de tomar en serio, en fin, me pasaron cosas; eso podría dar indicios de un acercamiento a esa vaina que se llama madurez pero ... no pues, nunca es suficiente.

El mundo es impaciente con los inmaduros. Cuando somos padres decimos: "¡¿cuándo vas a madurar?!" sí, esas mismas personas que en presencia de otros padres confesamos que quisiéramos que nuestros hijos nunca crezcan, que sean siempre los mismos niños que iluminan nuestras vidas y a los que hay que fregarles las suyas.
Cuando somos pareja le aceptamos todo al otro, todititiiito pero que ni se asome un resquicio de inmadurez porque "eso" es inaceptable, osea: engáñame, humíllame, azótame, pero como adulto, caracho! Cuando somos mayores la cosa se pone peor, apenas toleramos los síntomas de inmadurez en los jóvenes y sencillamente no los soportamos en nuestros contemporáneos Aaagh! huácala!

No hay nada peor que la mirada de desprecio de alguien que, instalado en la cúspide de su vida (se supone que ese es el rango de edad al que pertenezco, con todo controlado: profesión, estatus, prole y demás hierbas) te lanza cuando dejas entrever los hilos de tu inmadurez en su presencia. Nunca te sientes tan incomprendido, tan torpe, tan solo.

¿Por qué la madurez en los jóvenes es tan bien vista mientras que la inmadurez en los adultos es tan despreciable? ¿por qué debiéramos tenerlo todo bajo control cuando somos grandes? ¿por qué no inspiramos siquiera ternura? (Aaaay!)

Quisiera pensar que todo es un malentendido, que la velocidad de la vida hace que seamos incomprendidos. Los inmaduros no somos esos bobos que se niegan a crecer y aceptar responsabilidades de gente grande (Ok! ... un poco!) , los inmaduros somos personas en proceso.
En algún momento nos llegará la hora pero nada nos impide engolosinarnos en este instante, quedar absortos en la antesala.
Si lo irremediable es la madurez ¿por qué no saborear leeentamente el precioso proceso que nos llevará a ella?

"Los hijos te harán madurar" ¿cuántas veces hemos escuchado eso?. Yo tengo un hijo y ni por equivocación veo rastros de madurez en mi, a lo más: sentido común y en la medida justa para hacer de mi la madre que todos tienen y que nadie quiere (bueno, ¡ni tanto!). Al fin y al cabo, todos hemos sufrido las torpezas de nuestros padres al criarnos (¡algunos hasta crueldades! felizmente no es mi caso) todos hemos sido hijos de alguien en proceso, y eso no nos ha impedido crecer, vivir, amar. ¡¿Quién en esta vida no tiene problemas derivados de la inmadurez de sus padres al criarlos?!

Todo esto porque se acerca mi cumple y con ello la avalancha de pliegos de reclamos (¡ojalá fueran regalos!) que me hago a mi misma desde el otro lado del espejo (el lado más aburrido del espejo, dicho sea de paso) ¿será que me estoy haciendo mayor y por eso mismo ya no me soporto? Contra! y recontra! (por si las dudas).
Es que, en el fondo de mi alma ... ¡yo no quiero crecer! (esto ya parece el manifiesto de la gemela malvada de Peter Pan) y me niego a aceptar la madurez como regalo de cumpleaños Noooo! (yo quiero más botas, carteras, ropa estupenda que haga juego con mi estilo de vida: tan lindo, tan simple, tan banal) ... aunque, pensándolo bien, si quiero un regalo (es un decir: ¡quiero cientos!) un regalo muy especial que me haría la vida más fácil:

Dejar de cumplir años (¡sin tener que estar muerta!) y descubrir el jodido modo de ser tan inmadura como quiera sin tener que verme tan, pero tan, ridícula.

11 comentarios:

Chic dijo...

Fabu Mona, qué éxito tu blog, me encanta!

Y tengo un comentario a tu post...yo no pediría ser una persona madura o inmadura, pediría sabiduría para ser madura cuando debo e inmadura en su momento...y creo que eso tu ya lo tienes.

Saludos de una nueva blogger.

Damian dijo...

fabu, yo sigo siendo un inmaduro feliz, espero no tener tus disyuntivas ni tus responsabilidades, bueno a este paso creo q será asi.

ando... dijo...

A veces me pregunto cuándo voy a crecer y leyendo este texto me digo: menos mal que sólo voy a llegar a los 50.

Besos.

FabuMona dijo...

*Chic,
Bienvenida!
...pues, no. No lo tengo! ese es el dilema, mujer. Hay momentos en los que creo asomar la sombra de la sensatez sobre mi cabeza, pero la muy "pendeivis" casi siempre se pasa de largo y ese "casi" es lo único que me salva.
(enseguidita me paso por tu blog, me encanta el olor a pintura fresca!)

*Damian,
ya te llegarán Damy, es inevitable, mientras tanto disfruta porque ya te quedan pocos años para pasar piola ... ja ja ja

*Ando,
ja ja ja yo también decía lo mismo! y mírame ahora ... ja ja ja
(aquí es cuando las risas se convierten en llanto y ... mejor no sigo)

Raúl de Usvult dijo...

Monastress

La madurez ¡JA!, esa palabrita tan seria contiene tres simples significados. El primero: sazón de los frutos, y obviamente tu estás bien sazonada, eres un fruto con gracia y diversión. El segundo: Buen juicio o prudencia, sensatez, y de acuerdo a lo que has escrito, tu tienes "sentido común" es decir, posees lo anterior. El tercero: Edad de la persona que ha alcanzado su plenitud vital y aún no ha llegado a la vejez, lo cual también cumples pues estás en plenos 40s y aún no eres vieja, ¿De donde has sacado aquello que los logros y demás cosas te hacen una persona madura?, así que mi querida Monastress, madura eres.

Raúl De Usvult

FabuMona dijo...

*Barón,
¿quién soy yo para contradecir a mi amadísimo Barón?
(¡amé aquello de "bien sazonada"!)

Chic dijo...

Me encantó eso del olor a pintura fresca, jaja!

Unknown dijo...

A punto de subir al piso tres del edificio - euch! si parece que este año lo he subido en ascensor =S qué rapido paso!!! - me siento aliviadisima que no sea OBLIGATORIO ser madura a determinada edad .. y no porque sea o no aburrido sino que uno es como es, ni más ni menos .. y hasta creo que eso de la madurez es solo una percepción ... =)

Bueee me encanta tu blog y he de creer aquello que el piso 4 es el mejor lugar para dejar el devaneo atras =S ... Me lo confirmas? Jaaa!!

Abrazos desde casi casi piso 3 =)

FabuMona dijo...

*Organza,
si te parece que del segundo al tercer piso lo haces en ascensor, créeme que del tercero al cuarto te sentirás teletransportada, Ufff!

Efectivamente, cuanto más subas, la vista al parque se hace mejor pero ese mismo ángulo te permite tener una perspectiva curiosa (por decir algo) del panorama que dejaste abajo.
Suerte en la subida, compañera!

Mr.d dijo...

La edad es solamente un número,aveces dos...

FabuMona dijo...

Mr.d, a veces DEMASIADOS!