martes, 4 de noviembre de 2008

La Boda, toma 1

Cuando debería estar trabajando en el vestido Vintage que me pondré en La Boda, mis pasos me guían hasta aquí. ¿Por qué siempre dejo de hacer lo que debo sólo por darle la contra a la Responsabilidad? Porque, la verdad es que me encanta trabajar en el vestido, pero es como si la voz de mi inconciencia me dijese imperativamente: deja eso y ponte a escribir carajo!

(Amy me grita con su voz rehabilitada (¿o no?) You know that I´m no good ... me too, darling.)

Los días nos acercan al evento y en casa no se habla de otra cosa. Cuando creíamos que estábamos bien instalados en la temporada de los divorcios familiares Zaz! se nos casa el niño, en lo que esperamos sea su última y definitiva Boda, ya estuvo bueno, está bien que quiera refrescarnos la vida cada cierto tiempo, pero hay otros modos ...

Habrá que disfrutar al máximo esta boda que, de no mediar más sorpresas, será la última de los hermanos, sólo nos queda esperar por las bodas de los sobrinos, que así como van, habrá que hacer dicha espera sentadotes en el sillón más cómodo de la casa y no es que estén feos (no! en esta casa los hacemos lindos!) es que están verdes!

Mientras tanto la adrenalina se apodera de la casa familiar y nos lleva de la mano, en su alocado paso, por las rutas de la ansiedad. Una ansiedad bien simpática, hay que decirlo. No hay nada más placentero para una mujer que la crispación que antecede a una producción de gran gala, gracias a la cual pasaremos a ser las cenicientas por una noche.

El otro día me probé el vestido (el más probable, también tengo plan B y ... C) se lo enseñé al Hombrecito (el otro todavía no lo ve) y grande fue mi sorpresa al verlo tan emocionado, se quedó mirándome y se acercó a abrazarme mientras me decía "eres la más bonita" ... Glup! (juro que ésos son los momentos en los que pienso que debí sufrir más en el parto ...)

El baile que precede la Boda es todo un espectáculo en si: el vestido, los zapatos (todavía no los comprooo! es que pensaba ponerme otro vest ... bla-bla-bla), la carterita, el peinadote, manicure, paticure, tarrajeo facial ... cielos!
¿Qué sería de la vida de una chica sin una Boda en camino? Son los episodios especiales en la telenovela de nuestras vidas, cuando los vestuaristas, maquillistas y todo su entorno, justifican sus altos honorarios.

Ahora mismo tengo que salir porque creo que al fin me compraré los zapatos de cristal ... como mis nervios!

8 comentarios:

Anónimo dijo...

El próximo mes se casa mi mejor amiga y soy la dama de honor, ella está viendo lo del vestido porque todas las damas vamos igualitas :S pero para el civil, en donde soy testigo no me van a hacer vestido, entonces, con qué michi voy?

Yo juro que ya lo tengo resuelto, pero aun me faltan zapatos y bajar la tremenda llanta que no deja que mi cinturita de Thalia se distinga. Ese es mi problema, el engorde. Cuando engordo me crecen los cachetes, qué cólera, cómo hago para bajr eso en un mes. Dejan de tragar como lo hago, yo sé.

En fin, te acompaño en tus divertidas penurias de buscar el traje perfecto, junto con el peinado, las uñas, los dientes, los aretes, las pantys, el perfume, etc etc.

Un abrazo.

Lu
Mamá de DOS chancletas

Marysol Salval dijo...

Una boda...¡Qué bien!...Tómatelo con calma, ya verás que cuando pasen los preparativos lo pasarás super.
Suerte a los novios y que sean felices for ever.
Besos, querida Fabu

FabuMona dijo...

Lu,
debería imponerse la costumbre de hacerle el vestido a los testigos también!

Tengo un dato buenazo para bajar de peso en un santiamén, pero es sólo para casos desesperados y espíritus aventureros:
prueba un cebichito en el puesto de mercado más cerca de tu casa (créeme, la cercanía ES imprescindible!) y nada pues, deja que tu cuerpo se encargue del resto ... Ay!

Por lo que he visto, estás regia y estoy segura que sea lo que sea que te pongas,
VAS A MATAR! ja ja

Besos!

Raúl de Usvult dijo...

Bridal Mona

No entiendo el porqué de tanta emoción, es solo un acto protocolar más, como ir al teatro o a la graduación o al Carnegie Hall, cuando nos casamos todo funcionó como reloj suizo, obviamente mi esposa estuvo muy emocionada con la grandeza del espectáculo y con la regia compañía de aquel caballero de fina estampa que es mi suegro, pero, ¿será acaso que hemos acudido a tantas bodas y demás espectáculos de grand tenue que ya ni nos emocionan esas cosas? el viernes fuimos a una boda y el sábado a un cocktail a la casa de Fulano de Tal y el domingo acudimos a una cremación con pompa y circunstancia de un familiar, el lunes a una cena y el martes a un "té" nada fuera de lo común, los mismos trajes y vestidos oscuros y los mismos accesorios de plata de siempre. No entiendo las emociones por esas circunstancias, en fin, estamos en un pais libre dentro del cual cada quien puede expresar sus sentimientos a flor de piel.

¡Que vivan los novios!

Raúl De Usvult

FabuMona dijo...

*Marysol,
Pienso que los preparativos son la parte más exitante del asunto, pero tienes razón, ahora lo tomo con calma, en la Boda lo tomaré con ... hielo!
ja ja ja
Besos!!

*Distraído Barón,
¿cómo que no entiendes? ¡¿acaso no has estado casado con una mujer toooodos estos añooooos?! ja ja ja

(Darling, tu lista de eventos me recordó a las novelas de Jane Austen, cuando la burguesía provinciana se mudaba a Londres para la temporada de fiestas y todo transcurría de evento en evento ...)

El asunto es así; yo lo celebro TODO, desde el desayuno en piyama hasta una Boda. A mi me emociona todo y disfruto la vida porque se me ha dicho que no es eterna y yo hago caso, sé que hay gente que pasa por el mundo obviando ese pequeño detalle, pero yo no pues!
Y si
¡Que vivan los novios!
Beeesos!!

(btw: ahora se usa full color y lo "In" es el Dorado!)

Raúl de Usvult dijo...

Es cierto, mi mujer es todo un espectáculo de reales fuegos artificiales, el problema soy yo, tan parco e insensible, tan indiferente y distante, veo todas esas fiestas en blanco y negro, ese es el gran problema de ser inmortal ¡jajaja!

Querida Mona, el full color y el dorado ingresarán a mi vida hoy mismo, tienes razón la vida es demasiado corta, y te cuento que hoy cambié mi camisa blanca por una celeste, mi pantalón negro por uno azul y mi reloj plata con negro por uno DORADO con pantalla azul ¡Te hice caso! me sentí un poco extraño pero causé sorpresa, creo que es tiempo de pintar un lienzo impresionista.

Te quiero un montón, una vez más.

El aburrido Barón de Usvult fue raptado por la sublime gracia de la espontaneidad, teniendo al carnaval de Venecia s mi lado no supe aprovechar su encanto pero una linda princesa con máscara dorada y vestido negro "vintage" me hizo despertar del letargo.

Ráúl De Usvult

FabuMona dijo...

*Nada-aburrido-Barón,
ja ja ja ja
... cómo quisiera creerte!
ja ja ja ja
(primicia en camino!)

Rolando Escaró dijo...

afortunadamente ya tengo listo el terno que usaré en la boda de mi hermana (en febrero)

definitivamente para los hombres nos es mas sencillo